Con una Parroquia atestada de público y tras la celebración del Rosario, comenzaba la primera de las tres jornadas que antecederán la esperada salida de la Virgen el próximo domingo en Procesión con el ejercicio del Triduo en su honor.
La imagen se encuentra en actitud sedente, como es tradicional, portando su saya de salida en terciopelo marrón ribeteada con conchas de oro antiguas en su contorno, realizada por Manuel Vidal, conocido como "El Pavo" quien cariñosamente colaboró para que la Virgen tuviese un ajuar lo más digno posible tras la reorganización de las salidas bajo el palio de tumbilla.
El manto que porta es de brocatel en color beige con conchas de oro, es el habitual que porta para la salida, con pliegues dibujados que parten desde el trono dorado sobre el que se asienta.
En sus sienes la corona sobredorada con querubines de ángeles y la mantilla bordada de lentejuelas, así como el cetro (que conserva desde sus primeras salidas procesionales) y escapularios en metal dorado de Manuel de los Ríos con el anagrama de María y el escudo del Monte Carmelo.
Sobre su pecho la Medalla de Oro de la Ciudad, concecida a la Hermandad del Cautivo en el 50 aniversario de su Fundación (2010), que desde que la Cofradía se hace cargo de la Virgen porta para sus cultos, al igual que la Virgen de los Dolores.
El Niño Jesús del Carmen lleva una túnica blanca con estampaciones de ramilletes dorados, rematado por flecos y galones de oro, con calcetines rojos a juego con el cíngulo que ciñe su cintura, así como terciopelo dentro de su corona y zapatos dorados. Sobre su mano izquierda un barquito en metal plateado, aludiendo a la vinculación del Carmen con la marina y la gente del mar.
Les mostramos una amplia galería fotografía de manos de nuestro colaborador Alberto Reyes.
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